Acer Predator DualPlay

Vale, necesito contaros algo que me tiene flipando desde hace unos días. ¿Sabéis esa sensación cuando pruebas algo y no sabes muy bien si es una locura o es brillante? Pues eso me pasó cuando Acer me dejó trastear con su nuevo Project DualPlay… que por cierto, todavía no sé cómo pronunciarlo bien. ¿Dual-Play? ¿DualPlay? ¿El-bicho-ese-de-Acer?

El momento «¿Qué narices es esto?»

No, en serio, cuando lo saqué de la caja me quedé como… a ver, ¿cómo lo explico? Imaginad que un portátil gaming y una Nintendo Switch tuvieran un hijo. Pues eso, pero más raro todavía.

Historia real:
Mi compañero de piso entró en mi habitación mientras lo estaba probando:

  • Él: «¿Qué es eso?»
  • Yo: «Un portátil»
  • Él: «¿Y eso?»
  • Yo: «Un mando»
  • Él: «Pero…»
  • Yo: «Sí, son la misma cosa»
  • Él: se sirve otra taza de café «Es muy temprano para esto»

Las especificaciones (o como diría mi madre: «los numeritos esos»)

Vale, vamos a intentar poner orden en este caos de… eh… innovación:

  • Procesador: Intel Core de 13ª gen… no, espera, que este es el del año pasa… ¡ah no! Que sí es este
  • GPU: NVIDIA RTX 40… revisa notas sí, 4050. No es una bestia pero oye, mejor que mi primera tarjeta gráfica que era una… mejor no os cuento esa historia
  • RAM: 16GB (¡por fin alguien que no pone 8GB y se queda tan ancho!)
  • Almacenamiento: SSD NVMe que va como un… como… bueno, va rápido

El mando/pantalla/cosa esa que se separa

Aquí es donde la cosa se pone… interesante. ¿Os acordáis cuando Nintendo sacó la Switch y todo el mundo fue como «¡esto es el futuro!»? Pues Acer debió pensar «hold my beer» 🍺

Lo que han hecho es… espera, que tengo que dibujarlo… no, mejor os lo explico:

  • La pantalla SE SEPARA
  • Se convierte en un mando
  • Tiene su propia pantalla
  • Y… ¡funciona de verdad! (esto último me sorprendió más que cuando descubrí que mi gato sabía abrir puertas)

Momento vergonzoso pero necesario de contar

Primera vez que intenté separar la pantalla:

  1. Tiré demasiado fuerte
  2. Casi se me cae
  3. Grité un poco
  4. Descubrí que hay un botón para esto
  5. 🤦‍♂️

La experiencia gaming (o cómo perdí la noción del tiempo)

Vale, aquí viene lo bueno. Probé el Cyberpunk 2077 porque… bueno, porque cualquier excusa es buena para volver a jugarlo, ¿vale?

  • En modo portátil: Fluido, bonito, normal
  • En modo mando: ESPERA QUÉ
  • Mi cerebro: cortocircuito

Es como tener una Steam Deck, pero que también es un portátil, pero que también es… vale, me estoy liando.

Las cosas raras (que son muchas)

  1. El peso está… raro. Como cuando intentas equilibrar dos platos en el lavavajillas
  2. La batería dura… bueno, existe
  3. Los ventiladores suenan como… ¿sabéis cuando el vecino está haciendo obras? Pues menos que eso, pero más que un susurro

Momentos «¿Por qué nadie había hecho esto antes?»

Escena real de ayer:

  • Yo jugando en la cama
  • Se acaba la batería del mando
  • Lo encajo en el portátil
  • Sigue la partida automáticamente
  • Yo: sonrisa tonta
  • Mi gato: me juzga en silencio

El precio (respira hondo antes de seguir leyendo)

Em… ¿estáis sentados? Vale, el precio es… es… bueno, digamos que podrías comprar:

  • Una PS5
  • Una Switch
  • Una cena muy cara
  • Y aún te sobraría para el taxi de vuelta

Pero eh, ¡es que son como tres dispositivos en uno! (Este es el argumento que uso para autoconvencerme)

Conclusión (o intento de)

A ver… cómo lo digo… Es que… respira profundamente

Es como cuando pruebas algo nuevo en un restaurante:

  • No estás seguro de si te gusta
  • Pero sigues comiendo
  • Y cuando te das cuenta, el plato está vacío
  • Y estás pensando en pedirlo otra vez

P.D.: Si alguien de Acer está leyendo esto… ¿podríais dejarme probarlo una semanita más? Es para… em… investigación profunda 😅

P.D.2: A mi gato le gusta la caja. La caja es 10/10.

¿Alguien más ha tenido ese momento de «¿qué es esto y por qué lo necesito en mi vida?» con algún dispositivo? ¡Contadme en los comentarios!

Vuelve a intentar explicarle a su madre por qué necesita otro «ordenador de juegos»

por rigot